PRESENTE Y FUTURO DE HNOS. GANUZA
Las más pequeñas de la casa lucían ya el hierro de la GHE y su emoción no cabía en ellas. Brincaban, corrían y medían sus fuerzas bajo la atenta y paciente mirada de la matriarca. En el montículo se encontraba una tostada hembra, con unas hechuras que comenzaban a curvarse hacía abajo. Se trataba de "Panadera II"-66, quien era la viva imagen de su madre. Miraba de reojo a su hermana, y en sus movimientos se veía cuales eran sus intenciones. La paciencia de "Amapola" llegó a su fin y con tan solo caminar hacía ellas, las jovenes captaron el mensaje.
En el otro cercada esperaba una de mis favoritas la pequeña "Duquesa"-30 aunque de pequeña no le quedaba nada. Había perdido su curiosa mirada y los pelos claros, aunque sus defensas seguían siendo dos autenticas guadañas. No quedaba ni rastro de aquella tímida novilla que antes se escondía entre las demás y que ahora se alzaba desafiante. "Duquesa" es hija de "Ardores"-70 y su madre la brava "Bailarina"-19, siendo por lo tanto nieta de "Bailarina" una de las primeras vacas que los Hnos. Ganuza compraron a Don Juan José Laparte y gracias a la cual comenzaron a formarse los cimientos de la ganadería.
Comenzó su temporada en Villatuerta. Pronta se arrancaba a los cites de los mozos, apretando a los que se metían con ella, controlando y buscando.
"Podenca"-14 otra que destacó a su paso por Villatuerta, arrancándose una y otra vez a por sus adversarios.
Desde lo alto, hacía ya rato que observaba la alegría de la plaza, una vaca que a pesar de su nombre porta una seriedad que infundía más que respeto. Otra que dará de que hablar durante esta temporada.
El año pasado "Alegría" se encargo de protagonizar la final de Recoarte de Puente la Reina y durante su actuación no dejó títere con cabeza. Pronta y codiciosa, se arrancaba a por sus adversarios, creciéndose durante toda su lidia.
"Abejera"-74 |
"Jardinera"-21 |
"Gacha"-44 y "Faraón"-29, la combinación perfecta. Resultaba raro el hecho de observar a la afamada dama de la GHE tan cerca, en ocasiones me hacía sospechar de que en cualquier momento se iba a lanzar. Al parecer "Gacha" se quedo con ganas de guerra después de que en Villatuerta solo un valiente se atreviese a bailar con ella.
"Esquila" otra de mis favoritas, una autentica preciosidad de vacas, de antiguas hechuras, seria mirada y con su peculiar gargantilla a modo de collar de perlas. Aún me sigo acordando del detalle que dejó la temporada pasada en Tudela sacando a un mozo del callejón.
Entre los árboles se encontraba aquel pequeño príncipe que se jugaba su permanencia en la ganadería. Tras algunas actuaciones, "Gardacho", se ganó el titulo de rey. Asumiendo así la importante tarea de su madre de mantener la riqueza genética de su linaje. Junto a el se encuentra una punta de novillas, todas ellas astifinas y de seria presencia. Entre ellas se encuentran "Culebra II"-54, que porta un nombre más que conocido en esta casa o "Pocaropa"-64. A pesar de sus pocas salidas, sin duda habrá que seguirles la pista.
En la chopera se encontraba un mar amarrillo inundado por el sol y la calma, donde algunas de las vacas más importantes se encontraban junto a sus becerros. Destacaba a lo lejos "Anguila II", sus desarrolladas defensas dejaban al descubierto su ubicación.
Poco a poco la vida comenzó a florecer, divisando entre los rastrojos a los más curiosos del cercado, acompañados en todo momento por sus madres.
"Fusilera"-34 |
"Rubia"-42 |
"Jotera"-19 |
"Segadora"-88 |
"Amapola"-23 |
"Mocha"-28 una vaca de renombre que guarda un gran parecido con "Fusilera" pero que no guardan ningún tipo de parentesco. Contaba Fernando que "Mocha" se rompió sus astas en la manga y que después de aquello le crecieron con esta forma.
"Fusilera" desciende de "Amapola" y del toro "Segador", mientras que "Mocha" es hija de la vaca "Labradora" y el toro de nombre "Montañés".
Es curioso como aquellas vacas de mayor renombre en las plazas, aquellas que dan la cara contra todos aquellos que se enfrenten a ellas, luego en el campo son de lo más tímidas.
En agosto del año pasado, aún sin finalizar la temporada 2022, la familia Ganuza tuvo que hacer frente a una dura noticia, la perdida de "Bailarina" uno de los pilares que había levantado la ganadería. Dos meses después se conocía la muerte de "Panadera" una vaca curtidas en mil batallas de asfalto. Con la llegada de la primavera tuvieron que afrontar la perdida de "Carpintera" otra vaca de guerra que tanto había dado de que hablar.
A pesar de la oscuridad tras la perdida de estas vacas, las nuevas generaciones empiezan a brillar con luz propia, dejando destellos de lo que en un futuro podrán ser.
La temporada 2023 se presenta, al igual que otros años, de lo más prometedora para esta familia ganadera. Mucha suerte durante esta temporada y una vez más muchísimas gracias por el trato recibido y por abrirme las puertas de vuestra casa.